El calor elimina eficientemente bacterias y virus. La mejor manera de desinfectar una habitación es mediante el calor. De hecho, el calor puede penetrar profundamente dentro del área tratada, eliminando las bacterias y desactivando los virus.
El calor proporciona numerosos beneficios:
- Respetuoso con el medio ambiente
- Muy sencillo de utilizar
- No requiere limpieza posterior
- Sin riesgos de intoxicación por contaminantes ni reacciones alérgicas
- Mucho más eficiente que cualquier otra alternativa
Se sabe que el calor elimina los patógenos desde hace siglos. A lo largo de la historia, los científicos han sido capaces de demostrar cómo la exposición a altas temperaturas mata o desactiva una gran variedad de bacterias y virus. Esto está corroborado en la tabla que aparece a continuación:

En relación con la actualidad, estudios recientes han demostrado la estabilidad del virus SARS CoV coronavirus, causante del COVID-19, a temperatura ambiente o incluso a baja temperatura. De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud, sólo se observa una mínima reducción de la concentración del virus después de 21 días en el intervalo de temperatura de 4 ºC a -80 ºC. A temperatura ambiente, incluso después de 2 días, la concentración de virus se reduce sólo de manera mínima. Esta fuerte resistencia hace que al coronavirus extremadamente infeccioso.
Estudio elimina virus y bacterias con calor
Sin embargo, estudios realizados por The Lancet Microbe demuestran que el Coronavirus SARS-CoV-2 puede ser rápidamente desactivado a temperaturas más elevadas, tal como ilustra la tabla inferior, indicando que a temperaturas superiores a 56 ºC puede desactivar rápidamente el SARS-CoV-2.

Aplicaciones de tratamiento con calor
El tratamiento con calor puede eliminar bacterias y virus en una amplia variedad de aplicaciones, algunas de las cuales están recogida a continuación:

- Aviones
- Ambulancias
- Tiendas de emergencia y barracones militares
- Ropas especiales y equipamiento técnico
- Hospitales
- Hoteles y hostales
- Coches de policia
- Celdas
- Transporte público
- Alquiler de coches
- Vagones de tren
- Contenedores de comida
De manera común a todas ellas, es necesario que el calor se aplique el tiempo suficiente para penetrar de manera homogénea en todas las zonas a tratar, y completar con eficacia el tratamiento. Por lo tanto, se requiere de una fuente de calor (calefactor) combinada con un elemento capaz de medir de manera precisa la temperatura (termostato digital) en la zona más fría de la aplicación.
El efecto del calor a la hora de desinfectar una habitación se puede medir y documentar mediante el sistema de control Master IMCS. Uno de los más eficientes para este sistema es el calefactor de aire caliente eléctrico Master EKO 9.